martes, 5 de agosto de 2008

Día Veinte

Segundo día de grabación para el bajo......y último. Se cumplieron las previsiones y finiquitamos las partes de las cuatro cuerdas de una manera muy satisfactoria. Incluso nos hemos permitido el lujo de que en ciertas ejecuciones, y en momentos puntuales, haya utilizado técnicas que no domino en absoluto, como golpes en slap y ataques con púa. Supongo que Jose se ha dado cuenta de que, con lo bien que ibamos de tiempo, merecía la pena dedicar tiempo y usar esos recurso en los momentos que convenían, a pesar de que me costara un riñón ejecutarlos. Pero el resultado final ha sido aceptable y yo he aprendido una barbaridad en ciertos aspectos.

El productor ajustando el sonido de bajo, para que suene con un par de pelotas

Hoy por la tarde también se ha pasado Ando a ver qué tal iba la cosa y llevarse su batería del estudio. Así que la tarde ha transcurrido con agradables charlas y algún trabajo de edición por parte del productor. La grabación va tomando forma con las rítmicas casi completas y ya empezamos a tener la sensación de que esto va a ser un cañón de disco. Ahora y por mi parte, exceptuando algún berrido para los coros, la cosa se ve con una relajación brutal del trabajo ya terminado. Es la hora de los solos de guitarra y las voces, con lo cual la sección rítmica se permitira algunos chascarrillos de "presión" para los dos hachas de la G.

Me despido por hoy terminando esta crónica mientras escucho a el gran Elvis (si, si..el Rey!) y descansando para mañana bajar a por dos cabezales que tenemos reparando y seguir dando caña a las guitarras.

Ya queda menos, abnegados fans de la G, para gozar del fruto de nuestras horas de ensayo, creatividad y rayadas varias de los componentes de este singular combo del Metal.

Hasta pronto.

2 comentarios:

Escúchame dijo...

Tengo ganas de oir ese "bajo de hombres"...
Entre esto y la foto.. ay, ay...

j€$h dijo...

Santi campeón, saluda a l affffiiiiccccciiiiiooonnnn!!!!

MUAJAJAJA