Día Veintiseis

Me pregunto por qué cojones ponemos los días con mayúscula...

Soy yo otra vez y hoy no tengo mucho que narrar, porque aparte de no tener ganas de daros la ñaba, la mañana fue lo peor. Me parecía imposible terminar los solos que me quedaban y con ese espíritu derrotista, ni de coña me los pude picar.

Tuve que variar la ejecución de algunos licks, ya que eran demasiado chungos para plasmarlos en disco como Dios manda, pero me negaba a bajar el nivel de autoexigencia. Por lo tanto, me encontraba entre la espada y la pared: no podía hacer ciertas partes, pero tampoco quería modificarlas. Vaya movida, trooonco.

¡Qué dilema...!

Después de rebotarme conmigo mismo-para variar-me puse a ello. Y no hubo manera. Poca cosa hice por la mañana, más que protestar. Brrrr... Aun así grabé las armonidas del "Cross Of Shame".

Nos fuimos a comer nuestros bocatas al banco de marras, donde me tranquilicé un poco.

Os dejo con Dani.

Pues allá vamos. Llegué directo al estudio de Badajoz y me encontré a estos inmersos en la vorágine de los solos. Miguel estaba en modo "hez", así que amablemente le pedí que abandonara las estancias que me lo quería pasar medianamente bien grabando los solos.

Empecé con los del "Cross Of Shame", que son dos mini licks que se van cruzando con los de Miguel, que ya los tenía grabados y muy chulos, por cierto. Empecé a grabarlos con el Cry Baby, que quién me manda a mí meterme más complicaciones, como si no tuviese bastantes. Grabé un par de licks, y tenía dudas sobre la tonalidad de otro, entre Jose y un Miguel que había entrado de nuevo en el estudio, un poquito más asertivo, variamos la ejecución y listo. El Cross está completo.

Tocaba el del "In The Name Of" que es un lick pentatonicoso con una armoniba al final, que queda muy resultona. Se me estaba empezando a atragantar, entre mi paquetismo, y que me dolía la mano que no veas, consecuencia de un press de banca con un hercúleo pacense. Por ahí apareció Maroto "¡Vendido!" que venía a escuchar de nuevo el tema en el que se va a picar un solo.

Al final, pese al dolorcete, conseguí terminar el solo, dejando sólo dos para mañana, que me comprometo a terminarlos para dejarle la tarde a Miguel, que tiene que terminar tres de los suyos.

Después de la sesión grabatoria, nos fuimos de cañas y terrazas a ver la fauna autóctona. La cosa para variar se nos fue de las manos (no tanto como para hacernos fotos gayes), pero sí demasiado, todo alentado por un Marotez que se viene arriba con cero coma.

Mañana terminamos los solos (a falta de las colaboraciones) sí o sí.

Jackson Jenna Jameson... ¡Ahora vas y lo cajcas!